Everardo Zamudio Rodríguez
Director
Palau de la Música Catalana
Barcelona
40 niños y niñas del Coro de los Niños Cantores de Morelia México
Son las seis de la tarde en Barcelona. Se encienden las luces del majestuoso Palau de la Música Catalana. La sala, con un aforo prácticamente completo.
Sentados en la última fila de la platea, elegantemente vestidos con capas rosas y lazos blancos que adornan sus cabelleras, esperan con rostro de asombro y felicidad los 40 niños y niñas que integran el Coro de los Niños Cantores de Morelia, pertenecientes al Conservatorio de Las Rosas de México.
Después de 49 años sin presentarse en Europa, el pasado mes de abril la agrupación regresó de la mano de su director, Everardo Zamudio Rodríguez, y lo hizo por la puerta grande: en el gran Palau, un escenario reservado para artistas de primer nivel. Así lo emostraron estos protagonistas, de entre 9 y 14 años, con un repertorio lleno de voces coloridas, ritmo y armonía.
Una apuesta musical con un hilo conductor que recorrió desde lo clásico hasta lo moderno, pasando por el folclore tradicional y popular. Uno de los momentos más emotivos de la noche fue la interpretación del clásico Cielito lindo, cantado a dúo con el Coro Infantil del Orfeó Català, dirigido por Glòria Coma i Pedrals, con quienes compartían cartel y que terminaron coreando junto con todo el público. La sorpresa del cierre con broche de oro: un homenaje a la ciudad mediterránea, interpretando una pieza en catalán.
“Un privilegio, una experiencia inolvidable poder actuar en Barcelona, no solo en un lugar tan icónico como es el Palau de la Música donde se han presentado grandes exponentes musicales a lo largo de la historia y que representa la máxima aspiración
artística, sino también poder cantar en la Basílica de la Sagrada Familia, donde también fuimos invitados y tuvimos el honor de compartir nuestra música con la belleza de este lugar”. Con estas palabras, el director del coro, Everardo Zamudio, describió la sensación que dejaba en todo el equipo su primera gira internacional.
Este sueño cobra aún más importancia al recordar que el Coro de los Niños Cantores de Morelia apenas retomó su actividad profesional hace un par de años. Fundado en 1944 por el maestro Romano Picutti, quien fuera director del famoso Coro de los Niños Cantores de Viena, la agrupación se disolvió en 2020 a raíz de la pandemia. En 2022 volvieron a unir sus voces, emprendiendo un camino de reconstrucción lleno de trabajo y dedicación.
Una gira muy emotiva, marcada por el gran esfuerzo y compromiso de los niños y niñas, las familias y el Conservatorio de Las Rosas, quienes organizaron rifas y diversas actividades para recaudar fondos y cubrir los gastos del viaje, que sin duda alguna pasará a la historia de la agrupación.
Después de cuatro días de gira, el telón se cierra en la Ciudad Condal. El coro regresa a México con las maletas llenas de ilusión, aplausos y orgullo, con el firme propósito de que sus voces sigan transpasando fronteres y dejar en alto la cultura artística de Morelia, ciudad reconocida en 2017 por la UNESCO como Ciudad Creativa de la Música.